10 abril, 2014

A la espera.-


 Se apresta la Ciudad a celebrar su Mayor Semana del año, aquella en la que seculares cofradías harán sus devotas estaciones de penitencia a la Santa Iglesia Catedral, y parecerá que por unas jornadas todo se aúna para que grandes y pequeños revivan y vivan esta fiesta en el mejor sentido de la palabra. No seremos menos nosotros, de modo que disfútenla vuesas mercedes que para luego, es tarde...








27 marzo, 2014

Navegando.-

 Que aquesta ciudad fue Puerto de Indias es cosa sabida y común; que de ella partieron naos, galeras y galeones surcando mares y océanos, también; que a esta tierra nuestra arribaron tras duras singladuras pilotos, marinos y grumetes trayendo consigo riquezas incontables tras penalidades espantosas es algo que cualquier vecino avezado en Historia sabrá sin que seamos nosotros los que añadamos mucho más.


Poco recuerdo queda, salvo Archivo que llaman de Indias, de aquel glorioso y sufrido pasado, aunque no es menos cierto que esta mañana, como si de restos de un naufragio se tratara, hallamos curiosos aparejos para navegar salidos de Dios sabe qué navío.


Pocos rumbos marcará o pocos nudos establecerán estos elementos, pero si por arte de nigromancia lográsemos hacerlos hablar nos narrarían, a buen seguro, todo tipo de andanzas y peripecias...

NOTA: ha querido la Providencia que este sea el pliego que hace número cien desde que comenzamos a publicarlos. Gracias a los que nos han leído, a los que nos leen, y a los que nos leerán. 

05 marzo, 2014

La primera en la Campana.-


 Peculiar estampa la de estas minúsculas andas, labradas con singular pericia y rodeadas de correspondiente cortejo de nazarenos de luz, pues echamos en falta los disciplinantes; sin embargo, no menos importante y dulce es el otro cortejo compuesto por exquisiteces en forma de pestiños y torrijas, donde la miel es dueña y señora, y que nos hará paladear lo mejor de estas fechas cuaresmales que ahora comienzan. 

Disfrutemos de ellas, tanto de las fechas, como de las exquisiteces.


01 marzo, 2014

Al Norte.-





Si en anterior ocasión tuvimos privilegio de disfrutar de senderos y caminos allá por tierras de Aracena, no ha mucho cambiamos de lugar y en inmejorable compañía (pues contamos con incluso escolta canina) acudimos con presteza a Cazalla de la Sierra, a orillas del Huéznar, patria chica de nuestro tocayo Alonso de Cabrera, uno de los felices supervivientes de la expedición de Orellana al Amazonas. 


 Caminar entre encinas, quejigos, alcornoques y disfrutar de magníficos y agrestes paisajes fue todo uno nada más iniciar recorrido por estrechos vericuetos y alejados de mundanal ruido, acompañando a ello la jornada, que si bien principió con nieblas, concluyó con sol espléndido que hasta nos dio colores en rostro. 


Quede para otra ocasión alabar belleza de animales de raza porcina que campaban a sus anchas por aquellos predios, ejemplares sin duda de gran porte y trapío, y que a buen seguro, cuando les llegue su San Martín, serán exquisito bocado para quien pueda saborearlos.


Y quede, así mismo, constancia, de cómo cigüeñas en aquellas tierra han de ser sin duda peligrosa especie, sobre todo por azulejo que a continuación reproducimos y que pone de manifiesto cuán prevenido ha de ir el viandante en cierto sitio. 

28 enero, 2014

Por peteneras.-

Créame vuesa merced que ahora nos lee, que si bien hemos deseado escribir pliegos en aqueste blog con asiduidad mayor, no es menos cierto que negocios y tareas varias nos lo han impedido.

Paseando como hacemos de ordinario por la calle llamada de la Cuna, al llegar a esquina con la apelada de Francisco Pelsmaeke (insigne jurista y catedrático de leyes, por otra parte), topamos con que dos figuras andaban de jarana en pleno balcón, como si con su guitarra y seguidillas espantaran los fríos invernales que ahora padecemos.



Comprobamos, no sin cierto estupor, que eran curiosas e inmóviles efigies con las que búscase llamar la atención en negocio allí establecido, aunque a fuer de ser sinceros, no deja de ser extraña disposición y peculiar extravagancia.


03 diciembre, 2013

Colgados.-

Disculparán nuestra pertinaz ausencia por aquestos lares, mas ocupaciones diarias nos tienen sorbido el tiempo que desearíamos emplear en relatar asuntos hispalenses en estas páginas. 



Sin embargo, valga la siguiente instantánea para reflejar nuestro estupor y sorpresa al contemplar estos productos del cerdo secándose tras matanza en céntrica plaza. Ignoramos si se trata de ingenioso recurso de avispado comerciante, de trampa para atrapar amigos de lo ajeno o simplemente ardid del Santo Oficio con que descubrir criptojudaizantes o a quienes no guardan la pertinente abstinencia carnal (alimenticia, nos referimos) ahora que andamos en tiempo de Adviento.

Si algún avezado lector de estas páginas pasare por dicha instalación, no dude en acudir provisto de afilado cuchillo y hogaza de buen pan, pues es algo que sinceramente echamos en falta en el momento en que hallamos tan suculento simulacro digno de veneración sin duda alguna...

28 octubre, 2013

Al aire.-


 


 Quede dicho por anticipado que la veleta por excelencia en nuestra amada ciudad, Giraldilla, es conocida por común de los mortales, mas no es menos cierto que existen otras muchas en nuestra ciudad coronando torres y azoteas, y ahora que parece que mudan los calores por fríos y lluvias bien útiles resultan para amantes de meteorología.


 
Tienen como uso indicar dirección de vientos y aires, volanderos elementos que caprichosamente viran según Eolo trayendo consigo nubes o lluvias, siendo antiguo suorigen al decir de los estudiosos, pues bien podrían ser nacidas en la antigua Atenas, en peculiar torre de los Vientos que marcaba los ocho rumbos en forma de Rosa de los Vientos con un tritón en su cúspide a manera de veleta primera. 



Tampoco faltan quienes atribuyen al Papa Gregorio que, en recuerdo de las Negaciones de San Pedro, todas las veletas tuvieran forma de gallo, aunque como se puede apreciar, en Sevilla abundan de todo tipo, con formas heráldicas y hasta con figuras que más que atraer vientos podrían repelerlos…


13 octubre, 2013

En el aire.-


Paseábamos plácidamente y en inmejorable compañía por paraje próximo a Prado de San Sebastián cuando, de súbito, divisamos cómo en lontananza un extraño objeto pugnaba por desafiar a los vientos y a la poderosa atracción gravitatoria de nuestro planeta.


 
Tras acercarnos a su proximidad, (con suma cautela, todo hay que decirlo, no fuera a ser cosa del Maligno), comprobamos con gran pasmo que aquel objeto de llamativo color y enorme tamaño, se elevaba con individuos a bordo suya, pues poseía barquilla en la que los pasajeros subían y bajaban sin que por ello sufrieran mareos o desmayos. 

 Como quiera que se hubiera formado cierta fila para poder acceder a dicho artilugio, decidimos colocarnos en ella y aguardar nuestro turno, llegando el momento de poner nuestros pies en su interior y disponernos a subir a los cielos (valga la expresión sin ánimo jocoso, Dios nos libre). 

 
Durante la ascensión el mozo que manejaba los resortes de aquel armatoste nos explicó que aquel “Globo” (pues tal era el nombre del ingenio) podía alzarse merced al calentamiento del aire que se situaba en el interior de su forma, y que por ello, gracias a leyes de la Física nosotros podíamos alcanzar respetable altura y aún más, de no ser por oportunas sogas que impedían tal cosa. 

 
 
Descendimos de modo suave y lento, gratamente sorprendidos por la experiencia, y un poco temerosos porque el Santo Oficio viera en este vuelo asunto de nigromantes o brujas, más nos afirmaron que tal levitación era asunto legal y hasta muy usado para variados menesteres, sin que por ello se fuera en contra de lo establecido.
 
Más globos en Hispalensia, aquí.